Día de la Poesía



Hoy a los poetas
no nos harán descuento en la FNAC,
no nos cederán el asiento en el bus
ni nos comerán los bajos en los ayuntamientos
como es habitual y hasta de agradecer.

Hoy seguiremos llevando escondido
un mirlo dentro del pecho,
a salvo de sus cátedras, de sus menciones,
de sus diasdé y su estrepitosa mediocridad.

No olvidemos nunca
que en este país cuando nos miran
se les pone una sonrisa de barrotes,
se les llenan los ojos de cunetas.