Adiós, Vodevil



El Vodevil, nuestra sede de la jam “Poesía, no postureo” ha cerrado sus puertas definitivamente por los envites económicos derivados de la pandemia. Nos quedamos sin local pero ya tengo la cabeza maquinando dónde nos podríamos meter para poder seguir haciendo que la poesía siga teniendo un sitio donde pueda fluir de esta forma en la que la entendemos. Si algo bueno tiene la precariedad a la que ya estamos habituados los poetas es que nos han hecho nómadas y seguro que no tardamos en encontrar sitios donde volver a brillar.

Quiero agradecerles de corazón a Alberto, Mario y Belén por habernos abierto las puertas de su casa y desearles suerte en sus nuevos proyectos.  Y a todos vosotros también por seguir estando presentes en esta locura compartida.

Volveremos. El rebrote grande será el nuestro. No os quepa duda.