Rodrigo Córdoba -como buen editor que es- no ve el peligro y se le ha ocurrido coger a un grupo de poetas entre los que me encuentro y llevarnos a recitar de bar en bar. Como es un tío listo ha previsto todas las contingencias que podamos tener y ha contratado un servicio de subtítulos para que se nos pueda entender algo a partir del segundo bar. Al acabar el acto procederemos a vomitar todos juntos en el paso de cebra más cercano al IFEMA dejando allí la instalación para que pueda ser admirada en la próxima edición de ARCO.
El resto de kamikazes que me acompañarán en esta road movie son Jose Naveiras, Quino Romero, Carlos Torrico, Antonio Maldonado y el propio Rodrigo Córdoba, quien se hace responsable de nosotros por orden de nuestro agente de la condicional. Este es el último año en el que se podrá disfrutar de esta actividad debido a que el pedo que presumiblemente nos agarraremos está en contra de la nueva normativa municipal sobre la calidad del aire en el distrito centro que comenzará a aplicarse en breve. Fecha e itinerario en el cartel.
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